lunes, 22 de marzo de 2010

DEMENCIAL





Ya no se si es verdad o si es mentira

esta imagen que torna y que se escapa

un duende que me huye cuando atrapa,

cenizas que de pronto troca en pira;



es como un rostro ambiguo que me gira

una lumbre nereida que se opaca,

un dibujo que mengua y se dilata,

pupila que no está, pero me mira;



un seno que no encuentro y que suspira,

un vagido que nace cuando expira,

onirismos en gemas del rubor,



hay un turbión de orate que me apresa,

ritual de mi demencia su labio color fresa..

¡Urdir con mi locura loca boca de amor!



Construido a las 9,10 del

19 de marzo de 2010-

jueves, 18 de marzo de 2010

LA IMPRESIONANTE TRAGEDIA DE HAITI

PUBLICÓ la revista Literaria “Siembra”, que dirige la Escritora Salomé Moltó Moltó, en su número 71, Marzo 2010.




LA IMPRESIONANTE TRAGEDIA DE HAITI



Escribe RODOLFO LEIRO



La brillante Poeta, traductora, Escritora MARIÁN MUIÑOS, afincada en la localidad de Pontevedra, España, con referencia al espantoso fenómeno que significó el terremoto de Haití, espasmódicos ciclos devastadores con que nuestro planeta suele expresar las no siempre comprensibles evoluciones de su mundo interno, en un impactante poema, ha consignado esta singular pregunta:



¿Y cuando se terminen las imágenes?



A mi vez, traduje este demencial momento natural en un soneto titulado. “Cuando desaparezca el polvo”, en cuya estructura se deslizan ciertos decibeles que no suelen ser comprensibles especialmente para aquellos que, como quien escribe, siempre trata de ver algo mas allá de lo que se nos muestra o se nos dice.



Vamos llevando ahora las migajas de nuestra ayuda a un pueblo carente de recursos, en estado de pobreza no fácilmente dibujable y con un olvido tan manifiesto que podría afirmar, desde mi espíritu poeta, que se estaba en presencia de un pueblo marginado, olvidado por los grandes mercaderes que amasan las fortunas o que solamente expolian al mundo para apilar gabelas en oro que poco ha de servirles cuando llegue el momento de ocuparse del agua potable..



Donde se me hace indispensable consignar, en este peculiar instante, que la ayuda también va de la mano de gigantescas columnas de gendarmes, a los que seguramente les llegará más antes el pan y el agua de que hoy carece lo que ha quedado de lo que fue un País.



En mi concepto, no sujeto a imposiciones o a auto censuras comunes en estos tiempos, la ayuda de los ampulosos centros en que se agrupan los representantes de las potencias con amplio margen de divisas, debió acudir mucho antes, no solo para arrimar dinero en préstamo que ahora van a condonar ante la imposibilidad de recobrarlos, sino en la construcción de viviendas de tipo antisísmico, con lo que, un movimiento telúrico de esta naturaleza pudo no producir la impresionante cantidad de vidas inmoladas, niños, mujeres, hombres, ancianos....



He aquí, a grandes rasgos, dibujado el pasado de la tierra sumergida en el dolor punzante, que no me deja olvidar las tremendas hambrunas que soportaba el pueblo hermano.



Ahora vamos presurosos a socorrerlos, especialmente en la necra tarea de sepultar cadáveres y llevar un poco de agua y algo de víveres al desmantelado predio.



Y he aquí la pregunta de la Poeta Marián Muiños:



¿Y cuando se terminen las imágenes?



Que en cuanto a mi Argentina, ya han desaparecido de las pantallas televisivas.



Quiero suponer, quiero creer, que a partir de ahora una desinteresada ayuda posibilitará la reconstrucción con edificios antisísmicos, que no faltará el pan, que abundará el agua, que el hermano País de Haití, sin olvidar sus dolores, podrá erguirse de nuevo y presentarse ante el mundo sin el panorama del hambre y sus miserias.



Quizás algunos de mis amables lectores, de mis afables lectoras, arriben al pupitre solemne de las mismas esperanzas.



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martes, 9 de marzo de 2010

¡ESTÁN CONMIGO!







Hoy quisiera que las horas, con su espíritu ligero,

con el rango y panorama del espacio que me tiende,

me trajeran de mi infancia el rubor que no se vende

la sonrisa picaresca de mi viejo compañero,



me acercaran a mi mesa de romántico viajero

aquel ciclo de ilusiones, una página que extiende

su murmurio de proyecto como un clámide que pende

desde el asa con que el bardo emulsiona su rimero;



desde el plexo de mi verbo, un hedónico barquero

que me lleva en su barquilla como añejo prisionero,

llego a un ciclo de paisajes, solitario y sin testigo



donde guardo aquellos rostros de mi círculo primero

y en mi ronda de locuras, como un bálsamo alfarero,

¡otra vez los tengo cerca, otra vez están conmigo!



Construido a las 8,13 del

9 de marzo de 2010-03-09

Rodolfo Leiro

lunes, 8 de marzo de 2010

SE ABRE EL PÁRPADO DEL DÍA




Abre el párpado del día su bohemia alfarería,

vibra un viejo campanario alentando la jornada,

un pitazo de advertencia con un síntoma de rada

desde un barco que ya parte en constante sintonía



con el mar que acaso aguarda con su tónica bravía

mientras dora los cementos el rubor de la alborada

y un poeta, con su pluma, vigorosa llamarada

tienta arterias, busca rimas en la vasta orfebrería



que lo envuelve como rótulo imperioso que lo guía,

como un pleno de proverbios lujurioso que imponía

la flamante efervescencia, la pasión inevitada



que lo imanta, lo conmueve en gozosa simetría;

lo sacude con el verbo de bohemia geometría

y le pone entre sus manos una péndola inviolada.



Construido a las 9,48

del 8 de marzo de 2010.

Dia Internacional de la Mujer



Rodolfo Leiro

domingo, 7 de marzo de 2010

M U J E R,Día Internacional de la mujer




Arquitecto de mis propias convicciones

en la augusta planicie de mis horas,

estrépito de mis pláticas sonoras

que dispersan mis raras sensaciones,



en mi mundo surcado de emociones

que devienen de utópicas esporas,

hoy mi canto, mujer, el que tú doras

como palio himental de pulsaciones,



lleva un cuño de madre en oraciones,

besa un vientre feraz de conmociones,

roza el rito imperial de tu armonía,



y en mi viejo cuaderno de figuras

te dibujo en un salmo de ternuras

sobre un cielo de rosas en tu día.



Construido a las 6,27 del

7 de marzo de 2010-03-07

Rodolfo Leiro